Ella te espera
con las piernas abiertas
dentro de una cama
en una ciudad sin nombre.
Ella te complace
con una devoción ciega,
te lame y te besa,
te agarra y te muerde.
Y obedece tus deseos,
cualesquiera que sean:
más despacio, más deprisa,
más adentro. Y traga.
Y nunca has pensado
que detrás de su pecho
hay un corazón palpitante
igual que el tuyo, o muy parecido.
La mantiene con vida
y le duele
cuando se la arrancas de cuajo
sin pensar en las consecuencias.
2 comentarios:
¿Y dónde está ella?
todos tenemos un némesis.. ¿verdad?
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